Perú, Ollantaytambo

La noche anterior la pasamos en Ollantaytambo, un pueblo que también goza de ruinas propias. Para visitarlas te obligan a comprar el bono turístico, 70 soles si eres estudiante (sólo con carnet ISIC), aunque no vayas a visitar el resto de ruinas y artefactos arqueológicos que se incluyen en el bono. Ejem.

La parte más entretenida vino cuando nos salimos del camino marcado (sí, os estoy escuchando, qué malotes) y empezamos a subir por una empinada senda que podría haber sido infinita. Mas la recompensa aguardaba en la cima: un monumento y casita en ruinas inca para nosotros tres solos, desde donde pudimos sentirnos como Manco Inca. Ver fotos en Caralibro.

Ollantaytambo goza así mismo de un pintoresco bar de copas con decoración reggae-chillout, columpios desde los que Cris nos mareó (sin rencor pero es verdad 😉 y has ta una semi-auténtica barra de bomberos que sólo los valientes barman y yo nos atrevimos a utilizar. Bastante peligrosa después de un par de copas; mencionar, por si no lo sabíais, que Irene se emborracha a la media cerveza.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *